Otro ámbito de la proporcionalidad son los denominados repartos proporcionales, es decir, cuando se quiere repartir una cantidad de formar proporcional, ya sea directa o inversa, entre diversas partes.
Ejemplo
Un abuelo decide repartir
Para encarar este tipo de problemas habrá que asignar una incógnita a cada uno de las partes, de modo que:
La cantidad que le corresponde al nieto de
Como el abuelo ha decidido, por la razón que sea, repartir el dinero en función de la edad, al nieto más joven le tocarán
Donde
En este punto hay que citar otra propiedad importante de las proporciones, y es que:
Es decir, en una proporción, al sumar los numeradores y los denominadores de las fracciones que la integran se obtiene una nueva fracción que es proporcional a cualquiera de las implicadas.
Ejemplo
Aplicando esta regla al ejemplo se tendrá que:
Ya que la cantidad total repartida,
El nieto más joven recibirá:
Al nieto mediano le tocarán:
Finalmente, al nieto mayor le corresponden:
Si la operación se ha hecho bien, la suma de las cantidades repartidas ha de ser igual al total:
El ejemplo anterior es un caso claro de reparto directamente proporcional, puesto que los nietos con más edad reciben más dinero y viceversa. Pero:
¿Qué ocurriría si el abuelo decidiese repartir el dinero de forma inversamente proporcional a la edad de los nietos?
Pues que cuanta más edad menos dinero recibirán y viceversa, por lo que es necesario elaborar una relación que siga esta premisa.
Si se mantienen las incógnitas para cada nieto, al más joven le tocará una cantidad inversamente proporcional a su edad, de modo que si en el reparto directo le tocaban
Es decir, para expresar el reparto inverso hay que invertir el denominador de la fracción correspondiente a cada nieto, de modo que:
Ahora, para hallar la fracción comparable a éstas habrá que sumar los numeradores y los denominadores:
Si se opera el denominador que contiene la suma de fracciones se obtiene que:
De modo que la relación del reparto quedará:
O lo que es lo mismo:
En este punto ya se pueden realizar los repartos correspondientes a cada nieto.
Al más joven le tocará
El mediano recibirá
Y al mayor le corresponderán
Se puede comprobar que todo sea correcto sumando las cantidades para ver si suman los
En los problemas de repartos proporcionales es habitual que la cantidad total a repartir sea desconocida, pero en estos casos se dan pistas para averiguarla.
Ejemplo
Antonio, Alba y Alberto son tres camareros que siempre se reparten las propinas del mes en función de las horas diarias que trabaja cada uno. Antonio trabaja
Lo primero que hay que observar es que se trata de un reparto directamente proporcional. Lo segundo es darse cuenta que a partir del dato de lo que recibe Antonio se puede conocer todo lo demás.
Si se denomina
Pero, de hecho, el valor de
A Alba le corresponderán:
Mientras que a Alberto le corresponden:
Ahora, para saber a cuánto ascendía el total de propinas la opción más rápida consiste en sumar directamente las cantidades que se lleva cada camarero: